Permite realizar separaciones de fase reversa incluso con flujos elevados. Los disolventes empleados en las aplicaciones de fase reversa (como agua/MeOH) poseen un mayor grado de viscosidad que los que se utilizan para las separaciones de fase normal: concretamente, las mezclas de agua y metanol presentan el doble de viscosidad que el agua sola. Por este motivo sólo se pueden utilizar bombas de presión media para las purificaciones de fase reversa a alta escala. Esta presión también es útil para trabajar con columnas con un tamaño de partículas más pequeño: la sílice de alta pureza de BUCHI tiene un tamaño de 15 μm en lugar de las 40 – 63 μm habituales en otros materiales de relleno estándar, y la contrapresión generada aumenta considerablemente cuando se reduce el tamaño de partícula:
Contrapresión = k/(tamaño de partículas) 2.